Una habitación sin una alfombra de calidad se siente incompleta. Es el toque final: la obra maestra del diseño de interiores que puede mejorar los ambientes al realzar los muebles, los acabados del piso e incluso las paredes. Si quieres saber en qué lugar de tus habitaciones colocar los diferentes tipos de alfombras que existen, ¡lee el siguiente artículo!
En el comedor
Colocar una alfombra en el comedor se trata esencialmente de la experiencia de sentarte en la mesa del comedor. Deberás centrar la alfombra debajo de la mesa y luego asegurarte de que sea lo suficientemente grande para acomodar todas las sillas.
La clave es asegurarte de que las sillas aún se sientan cómodas sobre la alfombra cuando se retiren de la mesa para que alguien se siente en ellas. No querrás que las sillas estén medio encima y medio fuera de la alfombra.
Si no estás seguro de qué tamaño comprar, saca las sillas alrededor de tu mesa, luego mide el espacio para saber que tu alfombra encajará perfectamente debajo.
En la sala de estar
En la sala de estar, colocar una alfombra se vuelve un poco más complicado, pero aún así todo depende del tamaño de tu espacio y de tus planes para colocar tus muebles. Tienes tres opciones principales para salas de estar de varios tamaños:
1. Salas pequeñas
Para salas de estar más pequeñas, tienes dos opciones: puedes optar por una alfombra más pequeña (como una de 13 x 20 cm) que pueda flotar en la habitación entre los muebles, pero que vaya debajo de la mesa de centro.
Si estás tratando de hacer que tu espacio se sienta más grande, en realidad querrás una alfombra más grande que se adapte a todos los muebles (como en la sección de la habitación más grande a continuación) para unificar el espacio.
2. Salas medianas
Para salas medianas, elige una alfombra más grande (como una de 20 x 25 cm) y coloca tus muebles fijos grandes (es decir, el sofá) alrededor, de modo que solo las patas delanteras queden encima. Asimismo, procura que la alfombra se extienda más allá de los lados del sofá.
3. Salas grandes
Para habitaciones más grandes, te aconsejamos conseguir una alfombra más grande (como una de 23 x 33 cm) y usarla para enmarcar tu espacio. Luego, coloca todos los muebles completamente sobre la alfombra. Solo asegúrate de que todavía haya espacio alrededor del exterior de la alfombra para caminar, de modo que no esté parcialmente dentro y fuera de la alfombra.
Como alternativa, si estás tratando de dividir la habitación en diferentes espacios (como varias distribuciones de asientos o un concepto abierto con un área de comedor y asientos), usa diferentes alfombras para definir cada uno de estos espacios.
Incluso si los tamaños de alfombra sugeridos anteriormente no funcionan del todo con las dimensiones de tu hogar, aún puedes seguir los mismos principios de ubicación y comprar una alfombra según las dimensiones de tu sala de estar y tus muebles.
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En el dormitorio
Cuando se trata del dormitorio, el tamaño de la alfombra realmente depende del tamaño de tu cama. El tamaño ideal para una cama queen es de 20 x 25 cm, mientras que una cama king se vería mejor con una alfombra de 23 x 30 cm (y ese mismo tamaño funciona para dos camas twin en una habitación para niños). Para una cama matrimonial, una alfombra de 13 x 20 cm debería ser suficiente.
En cuanto a la ubicación de la alfombra, tienes muchas opciones, pero la forma más preferida es colocar la alfombra parcialmente debajo de la cama. En este caso, deberás colocar la alfombra de forma perpendicular a la cama y tirarla hacia abajo, deteniéndote unos centímetros antes de tus veladores para que quede a la mitad debajo de la cama, con la cama centrada en la parte superior.
Esto maximiza la cantidad de espacio utilizable de la alfombra y te brinda una superficie suave para pisar cuando te levantas de la cama. En una habitación más pequeña, también puedes intentar colocar una alfombra en el medio del cuarto o al pie de la cama para agregar interés y ayudar a unificar la decoración.
Si no deseas colocar una alfombra debajo de la cama o en el dormitorio, sigue este sencillo truco: simplemente coloca las alfombras a cada lado de la cama. De esta forma, tendrás esa experiencia suave y cómoda cuando salgas a caminar por la mañana, sin importar el tamaño de la habitación (o la cama).
¿Qué debes tener en cuenta sin importar en qué habitación coloques la alfombra? Recuerda que las alfombras pueden crear una ilusión óptica, así que haz que esto funcione a tu favor. Una alfombra demasiado pequeña puede hacer que cualquier espacio parezca desconectado. En caso de duda, opta por una alfombra más grande: unificará los muebles y hará que la habitación parezca más grande de lo que es.
Hasta aquí, te hemos mostrado cómo colocar alfombras en las habitaciones. Recuerda, tanto el tamaño de la alfombra como la forma son igual de importantes a la hora de intentar colocarla perfectamente dentro de una habitación y debajo de los muebles. ¡Esperamos que esta información te haya resultado interesante y útil!
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